Biografia

La vocación vinculada al arte es innato en una persona, uno gusta de la música desde la panza de mamá y con el tiempo se transforma en una pasión

Papá me regaló un combinado marca Ranser al terminar la escuela primaria. En aquel momento fue todo un acontecimiento; a tal punto, que mis viejos se tenían que bancar a mis amigos en el comedor de casa todas las tardes. Los sábados, a media mañana, era infaltable mi visita a las disquerías.  Billetera de papá mediante, compraba cuanta novedad aparecía en discos, ya sea simples o long plays; el ultimo de Elvis, Los Plateros, Paul Anka, Neil Sedaka y Pat Boone, entre tantos otros.  También era cuestión de guardar cierto equilibrio y conformar al viejo para que no quedara al margen y disfrutara de ese festín para los oídos. Entonces le compraba discos de Angel Vargas, Argentino Ledesma, el Rolo Lezica, y además de esto, dicho sea de paso, mi viejo también me enseñó a escuchar Mozart, Rimsky-Korsakov y Tchaikovsky, entre otros.

Un amigo del barrio de Villa del Parque, Beto Espinosa,  en la época que comencé a cursar la secundaria,  realizaba viajes mensuales por  Aerolíneas Argentinas , y en esos viajes, me compraba discos inéditos, exclusivos. Daniel Echeverry, productor y musicalizador de Modart en la Noche (mano derecha de Ricardo Kleiman) cursó al igual que yo, la escuela primaria en el Antonio Devoto. Daniel a través de un amigo en común, Gabriel Ranelli, tecladista de Luz de Mercurio y de Lito Nebbia, me enviaba discos originales y copias en acetato de los temas inéditos que el traía de sus continuos viajes, vía aérea New York- Buenos Aires; material que me abrió la puerta en un montón de lugares.

Héctor Primavera, deslumbrado por ese material discográfico, y con la intención de enriquecer su programa: Arco Iris Musical, una tira que iba de Lunes a Viernes a las 16hs, por Radio Antártida, me cedió los micrófonos de dicho programa, para que participara junto a el y en los bailables que realizaba en diferentes clubes por aquellos años. Ese fue el punto de partida para después, continuar desarrollando mi profesión  de disc-jokey. Con Cacho Torrex en Sportivo Devoto, luego en Escala, Una ventana al éxito y en unas cuantas discos de los años 70’. Mas tarde, ya como animador y productor, disfruté giras por el interior del país, junto a varios grupos y solistas, entre los que recuerdo con mas afecto a los chicos de Luz de Mercurio, Pintura Fresca, Katunga, Kano y los Bull Dogs, Pedro y Pablo y el Trío Galleta.    

Aquí en Buenos Aires, tuve el privilegio, con apenas 20 años, de presentar a Paul Anka en los carnavales del 67’, en Sportivo Devoto, donde también compartí escenarios con Sandro y los de Fuego, Los Tammys,  Juan Ramón, Wawanco, Cuarteto  Imperial, además de José Feliciano, Bovea y sus Vallenatos y muchos más. Todo lo vivido hasta ahí me motivó  a que en la actualidad, desde los 90’ hasta al presente,  pueda brindar a esa generación un “Revival” de aquellos años ,que hoy se los recuerda como dorados y que para los viejitos piolas de hoy, en realidad fueron sus años felices.